Bajamos el telón de esta Gira, se apagan las luces, personajes empaquetados, lanzas guardadas, molinos en reposo.
Es entonces cuando en el silencio del escenario, podemos cerrar los ojos y ver las sensaciones escritas en nosotros mismos por cada aventura.
Hemos saltado de peripecia en peripecia, de creación en creación. Hemos acercado a grandes y pequeños a esta locura, lo hemos vivido todo al galope, con euforia y algarabía.
Nos emociona sentir que ni un solo rinconcito en este colegio se ha resistido a empaparse de la imaginación de nuestros Caballeros Andantes.
Ahora que cerramos las puertas y ponemos FIN a este nuevo cuento, con montones de capítulos, nos quedamos con el regustillo de habernos entregado al cien por cien, haber descubierto en nosotros facetas desconocidas y haber vivido una experiencia inolvidable.
Hemos alimentado nuestra creatividad, nuestra imaginación ha crecido, las arcas de nuestra fantasía están repletas.
¿Qué nos llevamos? Encuentros, aplausos, diálogo, sonrisas...
Nos llevamos el corazón lleno de la alegría por habernos colado en el Quijote convirtiéndonos en compañeros de andanzas y en protagonistas enloquecidos por la magia de la lectura.